"Nothing. . . Everything. . . Nobody. . . Somebody."

Sunday, September 2, 2007

Espectros de medianoche


Si el mal llamado sector A tiene a Josie Diez Canseco y a Karina Calmet, ambas brujas, clarividentes y lectoras de cartas, la mesociudadanía profunda tiene a Hayimi. ¿Quién es este tío? Es un médium del que no tengo absolutamente ninguna información, salvo que aparece en el canal 20 de Cable Mágico, Visión Veinte, haciendo un rito tan ridículo como alucinante: se comunica con los muertos ahí mismo, en tu cara y frente a las cámaras. Hayimi toma la muñeca de las personas que acuden a él y comienza a contar todo lo que las ánimas le andan diciendo. En una de las emisiones últimas que me tomé la molestia de chequear, Hayimi torturaba a una pobre chica cuya madre había muerto cuando era niña. Después de decirle la crueldad de que el fantasma no quería comunicarse con ella -básicamente por haber sido una niña rebelde y malcriada-, Hayimi cambiaba el rollo y decía algo así como "pero ella ya ha olvidado todo y quiere que seas feliz". La chica moqueaba y moqueba, pero en el testimonio que grababa al final de la sesión, confesaba que la experiencia había sido liberadora. Por supuesto.

Estos testimonios no mienten, pero Hayimi sí. Es un estafador -como Josie Diez Canseco y Karina Calmet- que no se comunica con nadie porque no hay nadie con quien comunicarse. Hayimi dice lo que se le ocurre, apelando a una serie de generalidades y tratando de meterse en los intersticios de información que sus invitados le van dando (es lo que se conoce como "cold reading"). A veces acierta y a veces no, se corrige como se le da la gana y se aprovecha de las emociones contenidas y estresadas que tiene frente a sí. Pero desde que el mundo es mundo, estos estafadores vienen haciendo lo mismo una y otra vez, otorgando y afianzando una esperanza en el futuro sin la cual los seres humanos vivirían un poco más tristes. ¿La verdad te hará libre? No, la mentira es más efectiva. Y, en ese sentido, estos mentirosos no son culpables de nada.

Versiones más articuladas de este tipo de supersticiones que afirman la existencia de un más allá y de "otro plano" pueden encontrarse, para mi gusto, en la religión y, cómo no, en el psicoanálisis (¡suave que maltratan a su ello o id, que es casi como insultar al Espíritu Santo!). También la ufología -con Sixto Paz a la cabeza- propone esta humanidad que no está sola y que se mantiene vigilada por espíritus buenos y superiores que todo lo ven y todo lo pueden, pero que jamás se dignan a mostrarse tal cual son, salvo si es en forma de vírgenes que lloran, sombras legañosas al borde de la medianoche o puntitos danzantes en el cielo, demasiado "inteligentes" como para ser un fenómeno meteorológico. Los humanos estamos dispuestos a creer en cualquier cosa. "I want to believe" dijo Mulder y la frase antes que valiente, parece el grito desesperado de un derrotado emocional listo para la terapia.

Revisando El Comercio Web me topé con un blog de lo insólito administrado por David Hidalgo que se hacía una pregunta deliciosa: "¿Se puede fotografiar a los fantasmas?" La pregunta daba por hecho que existían, claro, y después de argumentar la posibilidad científica de hacerlo, Hidalgo comentaba que con un "experto" visitaría pronto distintas casas embrujadas de Lima para hacer un safari en busca de los espectros de la medianoche. La cantidad de comments a ese post fue espectacular: en Lima, al parecer, hay un culo de fantasmas.

Pero YouTube ya hizo la chamba. Aquí los dejo con un videíto donde verán una gran colección de fantasmas, no fotografiados, sino absolutamente videogénicos. Con este documento la existencia del mundo inmaterial está comprobadísima:

1 comment:

Victor said...

Que lastima que el autor de este blog use esos terminos para algo que obviamente no comprende -ni parece desear comprender- bien.

Es chauvinista creer que solo lo que nuestros sentidos pueden percibir es lo unico verdadero de este mundo. Yo personalmente he tenido una experiencia paranormal veridica, sin ser medium, y se de varias otras personas con casos similares.

La parasicologia no es 100% infalible, es cierto, pero tampoco la albañileria lo es; sin embargo, si una pared se cae, es por el albañil, no por los preceptos que componen esta actividad. De igual manera con la parasicologia. Una persona con evidentes cualidades para ejercerla es generalmente acertada y puede ayudar al resto de nosotros a enrrumbar mejor nuestras vidas.