"Nothing. . . Everything. . . Nobody. . . Somebody."

Tuesday, December 11, 2007

Periodismo vs. literatura


Se vienen las listas de lo mejor del 2007 y, cuando se trata de libros, el asunto a veces queda en las menciones a las mejores novelas, mejores libros de cuentos y mejores poemarios. Pero desde hace un tiempo, el Perú tiene una buena producción de libros de no-ficción deliberadamente escritos para el consumo amplio (crónicas y reportajes, sobre todo) que no suelen estar en el podio ganador a pesar de haber encendido el debate mucho más que la ficción. Este año el golpe editorial lo tuvo Santiago Roncagliolo y La cuarta espada, cuyo posterior debate creo que dejó algunas lecciones.

Otro par de libros populares fueron Secretos del túnel de Umberto Jara -que acaba de editar una edición aumentada de Ojo por ojo- y el celebrado –por aquí al menos- Rajes del oficio de Pedro Salinas. Si se cree que existen pocas reseñas de libros literarios, los de no-ficción son mucho más raros aún (una excepción ha sido el libro de Ronca). Pero en compensación tienen una feroz exposición en prensa en notas amables a los autores. Para algunos lectores, creo, esa atención mediática los hace sospechosos, porque el sentido de la oportunidad comercial parece ser la única razón de ser de su publicación.

Para mí, por ejemplo, es un síntoma de estas diferenciaciones que el todismo del Moleskine de Thays no mencionara en ninguna parte ni el libro de Jara ni el libro de Salinas, pero que sí le dedicara un post a la lista de los mejores libros del New York Times, lista que incluía libros de no-ficción y entre los que se podía leer un título como Los nueve: dentro del mundo secreto de la Corte Suprema. Haz de tu blog lo que quieras, dijo alguien.

Pero el periodismo también puede ser algo desdeñoso con la selección de los literarios. Ayer Fernando Vivas dedicó su columna al libro Lima freak de Juan Manuel Robles (antes la había dedicado a Pequeños dictadores de Luis Felipe Gamarra, ya que ambos, Robles y Gamarra, empezaron trabajando juntos, pero terminaron publicando por separado). El texto es elogioso y viene con un par de líneas algo ladillosas con la literatura . Dice Vivas:

Como periodista, [Robles en su libro] privilegió la observación y en los mejores casos esta se ha impuesto a la mera construcción literaria del personaje. El método ha sido tan o más importante que el estilo y al final del libro Juan Manuel entrega una suerte de guía que puede ser útil para que otros se lancen a la caza de sus propios 'freaks'.

Desde este "Mucho ojo", aliento la cacería porque, mientras nos llenamos de montañas de poesía y narrativa intrascendente, escasean los ensayos biográficos que nos ayuden a comprender nuestra fauna de pantalla y, de esa forma, a nosotros mismos.

No creo que Vivas se la agarre con la literatura como una forma de ver las cosas. Es más, en alguna de sus columnas elogiaba la chamba de los blogs literarios. Pero creo que sí apunta -sin mencionar ningún libro específicamente "intrascedente", lo que al fin y al cabo es una ligereza- a esa carencia que muchos escritores jovenes o viejos ostentan con cierto orgullo y que a los periodistas les sobra: el sentido de la pertinencia, de estar siempre con el olfato atento a lo que sucede alrededor, a saber diferenciar lo que es interesante de ser leído de lo que no, a no confundir el ombliguismo opaco con el estilo o las inquietudes personales.

A veces pienso como él y a veces no. ¿Cuando pienso como él? Cuando el periodismo rescata esos temas que para nuestra literatura -carajo, tan solemne la mayoría de las veces- mira de reojo: la cultura popular que nos ha dado tantos grandes personajes, mitos y lecciones. ¿Cuándo no? Justamente por lo mismo: cuando el estrepitoso zapping mental de la actualidad sólo encuentra la paz en un poema a la inmovilidad de la planta. Y así uno llega a la pregunta de siempre: ¿para qué uno lee literatura? ¿Para qué sirve?

To be continued (no se cuándo pero en algún momento)

39 comments:

Anonymous said...
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Anonymous said...

a mí también me gusta leer a Vivas pero me jode que siempre deje en ascuas a sus lectores. Hace poco dijo que Jaime Bedoya estaba metido en cosas oscuras en internet y no dio más detalles. Ahora golpea a los narradores y poetas y no especifica. Un poco más de valentía, por favoooor.

Ariana

Diabloguero said...

Es cierto lo que dice Vivas, que se publica demasiada poesía y narrativa mala y que, en cambio, faltan libros de ensayo y de "no-fición", buenos y malos. Pero no veo por qué estos libros de "no-ficción" tendrían que ser escritos por periodistas. García Márquez, Vargas Llosa, César Vallejo y muchos grandes escritores han publicado buenos libros de "no ficción". En cambio, reconocidos periodistas al intentar incursionar en la narrativa o la poesía han producido libros malísimos. Sin ir muy lejos, uno de los periodistas que mencionas en tu post, Pedro Salinas, tiene varias novelas y libros de cuentos que estoy seguro que él mismo prefiere olvidar. Hasta Hildebrandt tiene una muy mala novela. No llama la atención que un "literato" escriba un buen libro periodístico; pero que un periodista escriba un buen libro "literario" es casi imposible.

Anonymous said...

me permito disentir con Diabloguero. Los mejores libros de Kapucinski (disculpen la grafía simplificada), por ejemplo, Viaje con Herodoto, tienen de lejos más valor literario que otros viajes interiores narrativos. Y así hay algunos ejemplos más -los libros de viajes de Javier Reverte también- que nos previenen de generalizar. Dicho esto, es cierto lo de Fantomás: faltan más libros de no ficción, pero no será porque estos requieren de presupuesto especial?

Anonymous said...

Hola, soy Juan Manuel Robles, leí la columna de Vivas y me llamó mucho la atención el comentario que apara destacado aquí. Quisiera aclarar, y me gustaría hacerlo por este medio, que mi libro es literatura, o sea, lo considero literario y quiero advertírselo así a los posibles lectores. Me defino como escritor y Lima freak es simplemente un libro de literatura de personajes reales.

Saludos

Juan Manuel Robles
Parablogger

Anonymous said...

no entiendo. el parablogger ahora no hace periodismo sino paraperiodismo?? no me interesa comprar un pajazo de robles sobre laura bozzo. yo pensé que iba a comprar algo mínimamente factchekeado. ahora no compro nada.

Anonymous said...

no entiendo. el parablogger ahora no hace periodismo sino paraperiodismo?? no me interesa comprar un pajazo de robles sobre laura bozzo. yo pensé que iba a comprar algo mínimamente factchekeado. ahora no compro nada.

Anonymous said...

lo único bueno que tiene Thays es su tono de voz neutro, no tiene la vocecita engolada de otros que se creen divos, tal vez sea por su forma de pronunciar las palabras, después, es lo mismo que Cueto y Ampuero, solo que no vende como Ampuero y no gana premios como Cueto. Sobre Vivas, le gusta machacar pero sin decir nombres, es muy cómodo, y me parece bien que el autor Robles diga cómo concibe su libro. Gracias.

Paula

Unknown said...

Que mi libro sea literatura no quiere decir que no sea real. Todo lo que está en mi libro es verdadero. He pasado muchas horas con los personajes y he hecho decenas de entrevistas. Y está recontra factchequeado. En eso consiste la no ficción.

Saludos

Juan Manuel

Anonymous said...

Acabo de leer el post, y solo me gustaría agregar algo, así discrepe con algunos. Considero que un libro de perfiles, crónicas o reportajes, es, en suma, un trabajo periodístico. Particularmente, en un libro de no-ficción, me interesa más el dato revelador, la interpretación genuina, la novedad, por encima del estilo del narrador - periodista. No es que no me interese, pero de hecho todo trabajo periodístico debe tener una novedad. En el caso de Pequeños Dictadores, libro de perfiles, pretendo que se lea como un libro construído sobre la base de información desconocida sobre los personajes que rodearon a Fujimori y Montesinos.

LF

Vicky said...

Juan Manuel, me encantó leer tus posts sobre los chifas, pero dejé de leerte cuando empezaste a postear sobre el clima, hum... como que no me gustó ya. Suerte con tu libro, espero conseguirlo pronto.

Y a todo ésto -y sin ánimo de pelear- quisiera que me explicaran por qué un libro de no-ficción requiere de un presupuesto especial (me imagino que éso quiere decir que uno de ficción cuesta menos) si desde mi punto de vista ambos necesitan de lo mismo para poner veracidad a lo que dicen.

¿Estás de acuerdo con éso, Juan Manuel? ¿qué cuesta más, uno de ficción o uno de no ficción? Y para que aclaren el panorama, explíquen en qué se va la plata, pongan cifras, sinó no capto.

Anonymous said...

un libro de periodismo normalmente es un libro de investigación, de entrevistas, de búsqueda, viajes etc. debe costar más que escribir cuentos o poemas, no? Más bien me preocupa que se repita esa suerte de subvaloración que tienen los periodistas de su propio trabajo. Como que siempre están comparándose con los literatos y tal vez valga la pena ser un buen periodista antes que un literato que escribe vanidades, no creen?

Fantomas said...

(en primer lugar espero que j.m. robles sea el sr. robles y l.f. gamarra sea el sr. gamarra. dicho esto, comento)

creo que lo que dice varguitas es el punto que vivas rescataba: algunos libros periodísticos nos revelan más sobre nosotros (aqui el "nosotros" debe entenderse como una comunidad imaginada de lectores peruanos) que la literatura que se está produciendo. es decir que, en rigor, un "periodista" no debería sentirse menos que un "escritor", ya que puede ser tanto o más revelador y trascendente.

pero lo que puede sonar simple en un principio, bien pensado, no lo es.

y j.m. robles -parablogger- ya hizo explícita la dificultad. el considera que lo que hace es "literatura", solo que literatura sobre lo verdadero y lo real.

pero de ahi llega gamarra y nos dice que si trabajas sobre lo real, por mas floritura que hagas, estás haciendo periodismo. él y vivas definen grosso modo, lo "literario" como un asunto estilístico.

entonces en qué quedamos?

antes que mandar un rollo sobre lo "literario", que es un tema hasta cierto punto infinito e irresoluble, a mi sólo me queda claro que vivas, implicitamente, y robles, muy explicitamente, entienden que el periodismo y la literatura tienen distinto valor, con una diferencia a favor de la literatura.

pero en tanto que vivas reivindica al periodismo -halaga a robles como periodista, A PESAR de sus intenciones literarias-, robles está dispuesto a defender su rótulo de escritor, es decir, de literato. el hace literatura que casualmente trata de asuntos reales y verdaderos y punto.

dicho todo esto me pregunto: ¿por que la literatura se percibe como "superior" al periodismo? ¿o es solo una coquetería del dandismo literario y ahí queda? ¿en que sentido robles dice que su libro es literario?

quizás tenga que ver con esa definicion antiquísima de aristoteles donde se señalaban las diferencias entre la historia y la poesía. historia -y el periodismo es la historia de lo reciente, por inventarle una definicion- habla de lo particular. y la poesía -la literatura- de lo general. y es por eso que la última es más filosófica y profunda.

es asi? finalmente todo es una pelea por un lugar en la posteridad?

saludos y gracias por los comentarios

ocraM said...

yo también recuerdo al Viejo Ari en las típicas chupetas de coleguitas, justo en ese momento en el que todos empiezan a confesar que sus viejos o sus propios miedos no los dejaron estudiar o dedicarse a la literatura y decidieron optar por chambear en prensa.

pues siento proclamarme aristotélico hasta para esto: la poesía siempre será superior a la historia.

el problema es que también hay historia poética. o sea, ta bien que Aristóteles nos haya traumado a tal punto que todo el mundo siente la necesidad de definirse y, por defecto, uno se define como A o B, pero, vamos, el viejo también era defensor del punto medio, ¿no?

o sea: relájense. para la poesía lo que importa es que los libros sean bellos. y para la historia, que sean verdad. para llegar al punto medio, hay que equilibrar ambos.

amén.

Anonymous said...

Cuando Aristóteles hablaba de poesía, hablaba de poiesis y de grados de mimesis, no de escribir versos; Aristóteles no podía estar comparando poesía con historia como entendemos esos conceptos hoy porque no existían. Y las partes en que Aristóteles habla de algo parecido a la verdad para hacer sus jerarquizaciones, la tragedia queda por encima no porque sea más bella sino porque es más cierta (más original, que quiere decir más parecida a la verdad). Acá parece que están hablando de otro Aristóteles.

Anonymous said...

Anonimo de las 7:43: Gracias por aclararnos que no sabes de lo que estamos hablando. ¿Podrías ahora aclararnos aquello que no sabemos? ¿Qué quería decir Aristóteles con esa diferencia? ¿Que significaban los conceptos que mencionas?

(¡Abajo la esfinge, abajo!)

Anonymous said...

pero, anónimo de las 7.43, la poesía y la historia de Aristóteles se deben entender más como categorías inclusivas que como definiciones exclusivas. sino para qué chucha, como diría Salomón Lerner, sirve Aristóteles'??

Anonymous said...

Perdon, dije "sabes" cuando debería haber dicho "sabemos". Sorry, pero es que este teclado no está en braille.

Anonymous said...

Hay un artículo de MVLl que salió en Selecciones sobro para qué sirve la literatura, que es una versión condensada de un discurso dado en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, en febrero del 2000. ¿Alguien lo tiene por ahí?

malasangre said...

«La belleza es verdad, la verdad es belleza»: eso es cuanto sabemos –y debemos saber– sobre la tierra.

John Keats

Fabber said...

Interesante discusión. Evitaré los parrafones a los que soy adicto y me remitiré a recomendarles este sabroso artículo de Velero 25 a propósito de la pregunta gorda del post ¿para qué sirve la literatura?

http://www.velero25.net/2007/nov2007/nov07pg02.htm

LuchinG said...

En el artículo "Es la bellleza un signo de verdad"
(Is beauty a sign of truth?) nos cuentan cómo muchos científicos han dejado de lado teorías debido a que no cuadraban con sus preferencias estéticas. El caso más recordado es Einstein y su "Dios no juega a los dados".

Anonymous said...

Eres muy bonita pero mentirosa enganas a los hombres siempre con mentiras con mentiras mentirosa

Anonymous said...

Este blog está convirtiéndose en uno de esos lugares donde la gente ataca anónimamente y no aclara de dónde salen sus datos. El segundo comment acá arriba dice que Vivas ha acusado a Bedoya de estar metido en "cosas oscuras en internet". Pero no dice cuándo salió ese artículo de Vivas ni donde encontrarlo. A ver pues, aclaren eso.

Anonymous said...

Fantomas, uno de los pocos que ha sobrevalorado el librito de Salinas, remata su post con: Y así uno llega a la pregunta de siempre: ¿para qué uno lee literatura? ¿Para qué sirve?

Vivas dice que: escasean los ensayos biográficos que nos ayuden a comprender nuestra fauna de pantalla y, de esa forma, a nosotros mismos, a propósito del libro de Robles.

Rospigliosi remata en texto introductorio al libro de Gamarra: Este es un libro que muestra nuevos ángulos de las biografías de algunos de los personajes representativos de nuestra historia reciente y ayuda a entender por qué el Perú está como está.

Vuelvo a la pregunta inicial: para qué sirve la literatura, y me respondo: para nada, felizmente, como la sensación que me causó Lima freak. Recién estoy leyendo Pequeños dictadores.

P.D. Por qué Thays tendría que mencionar libros que no le interesan, que ni siquiera lee, hojea?

Anonymous said...

Copia las tres frases resaltadas en el artículo de Selecciones:
- La literatura es un refugio para aquel al que le sobra o falta algo para no ser féliz.
- Las novelas nos arrebatan de nuestra carcel realista y nos llevan a mundos de fantasía.
- La literatura nos recuerda que el mundo está mal hecho y que podría estar mejor.
El fin de semana escaneo el artículo y lo cuelgo por algun lado.

Anonymous said...

El segundo comment acá arriba dice que Vivas ha acusado a Bedoya de estar metido en "cosas oscuras en internet". Pero no dice cuándo salió ese artículo de Vivas ni donde encontrarlo. A ver pues, aclaren eso.

Anonymous said...

Lo dicho por Vivas, no es mas de lo que se comenta en los corrillos de Caretas, sobre una manchita de estudiantes de Lite, que estan detras de un conocido Blog, y al que al parecer mas de uno en Caretas ha metido la mano.

Anonymous said...

¿Pero dónde dice Vivas esas cosas? ¿Alguien ha visto ese artículo? ¿O es un invento más?

Fantomas said...

jamas he leido que vivas diga que bedoya estuviese en cosas oscuras por internet.

eso parece un invento de "ariana" al inicio de los comentarios, que curiosamente pide "valentia".

como regla general nunca crean estas tiradas de dedo si no vienen con un link o una referencia. normalmente estan hechas para joder, que es por supuesto la razon que el bacin llamado PEH sea a veces francamente aburrido.

Fantomas said...

para responder una pregunta hecha arriba del anonimo de las 11:09

"P.D. Por qué Thays tendría que mencionar libros que no le interesan, que ni siquiera lee, hojea?"

yo no he dicho que deba. solo mencionaba que ese hecho -de obviar los libros de no-ficcion escritos aquí- me parecía un síntoma de las diferencias de recepción que existen localmente entre ambos rubros, ficción (prosa y poesía) y no-ficción.

y sigo insistiendo que el libro de salinas es irresistible.

Anonymous said...

Lo que no entiendo de Fantomas, que empieza sospechosamente a hacerle guiños más que elegantes a Faveron, es que los insultos y calumnias de Faverón le parecen chistes y los chistes de puertoelhueco le parecen insultos y calumnias propios de un urinario. Cuál es la diferencia. Acaso Fantomas prefiere que el humor ataña a conceptos y no a funciones fisiológicas. Eso es una diferencia estética y no moral acaso. O sea que Faveron si puede insultar impunemente y ser celebrado porque es conceptuoso. Que elegante y sofisticado que te estas volviendo Fantomas, casi como nuestra susanita F. y es realmente una pena que sea así. No comparto que puertoelhueco tenga a Faveron monotematicamente, eso ya es asunto de literatos, salvo que nos tengas que decir también ahora, que ya mandaste tu cuentito a Quipu.
Es sintomático notar como es que a un grupo de bloggers, últimamente, les esta empezando a gustar que los insulte Faverón, quizá porque se toma diez minutos para pensar el insulto en un sofisticado seudo academicismo culto, que en cambio los chistes de puertoelhueco que más huelen a cultura popular, que para ciertos bloggers es sinónimo de basura, letrina, etc. Me parece que tal gusto extraviado en exquisiteces de ciertos bloggers valdría la pena si a Faveron le importara, pero le importa un comino. Es una situación muy parecida con la de Claudio Pizarro, creo que todos ya sospechábamos que a Pizarro la selección le importaba un carajo, incluso algunos periodistas lo decían en sus respectivos medios, pero también fuimos testigos de otro hecho curioso, vimos como la mayoría de esos periodistas se cortaban cuando lo tenían al frente, es más, cuando sabían que lo iban a entrevistar no perdían la ocasión para acicalarse “elegantemente” y así tratar de parecer infructuosamente metrosexuales, pero no hacían otra cosa que el ridículo, y después no sabían ni que preguntarle. Si un día Faveron se conecta amargo a la Web, es muy probable que patee hasta al elegante de Fantomas que es nuevo en estos menesteres oportunistas de mover la cola a su puerta. Muy pronto seguramente le abrirán la puerta y veremos al tal Fantomas unido a la secta VIP Gran Combo Club, cuando les convenga a ellos.

A Faverón hay que dejarlo ahí, como bien lo dijo Manrique. Pero tampoco hay que dejar pasar sus exabruptos. A mi me parece alguien verdaderamente nefasto porque insulta haciéndote pensar que son razones las que él esgrime. Construye el efecto psicológico de la demostración cuando el mismo debe saber -si es culto, debe saberlo- que las demostraciones son imposibles. Aplausos para el virtuoso del líbelo, para el metrosexual de la cultura. Para el que tanto como defiende una causa defiende la contraria dependiendo de su humor y de su conveniencia. ¿Eso les parece moral, razonable, estético? Al menos puerto el hueco insulta en un solo sentido. Faverón lo hace a diestra y siniestra para elevarse solito con la moralidad, llegando a bajezas lamentables como el insulto injustificable (justificado solo por el tal Luching por tratarse de un insulto realizado en una comunicación privada, según él) contra Reaño, hecho que devino en lo que todos conocimos, nada ha sido tan bochornoso en la blogosfera peruana.

LuchinG said...

A los que recién hayan entrado a este blog en este post: no se ataranten por lo que dice el anónimo de las 11:29, por favor lean esta conversación para darse cuenta de que todo lo que dice es falso.

Anonymous said...

parece que Bedoya quiere ingresar al GCC, como Luching -el nuevo sicario de Faverón- ya estaría allí, bajo su verdadero nombre.

todos tendrán su cuentito en Quipu

LuchinG said...

¿Por qué? (¡snif!) ¿Por qué me tratan así? (¡snif!) ¿Qué, no ven que tengo sentimientos? (¡snif!) (¡snif!) Yo siempre he admirado a los anónimos, eran mi héroes, mis paladines, mis santos, y ahora... ¿qué será de mí sin su cariño, sin esa mirada comprensiva que desde el cielo me daba su calor, cual astro rey en dia de verano perpendicular? ¿Qué será de mis ilusiones de niño, de mis ansias adolescentes, la base de mi adultez y el cobijo en mis años postreros? Ahora todo es un desierto, un páramo, un lote baldío. No queda nada... nada... nada....

Anonymous said...

Diferencias de recepción? Acá hay una: y sigo insistiendo que el libro de salinas es irresistible. Autor: sin querer queriendo Fantomas (o debería decir el chavo del ocho?), acusado (in)justamente de jugar en pared con la revista Domingo de La República y sobrevalorar publicaciones no ficcionales, lo que también podría deberse a afinidades gremiales.

Anonymous said...

te me caiste fantomas, y Luching, como bien lo dijo La Cebolla hace rato se cayo del arbol y no se ha dado cuenta

Anonymous said...

Pregunta: Juan Manuel Robles ha publicado un perfil sobre Laura Bozzo en su libro Lima Freak. Simultáneamente, ha publicado otro sobre el mismo personaje en el libro Pequeños Dictadores.

¿Son iguales? Y si la respuesta es afirmativa, ¿no debería haber una advertencia para sus fans compradores?

¿No son iguales? Y si la respuesta es correcta, ¿no es un poco vano esto de pretender reflejar la Realidad, encontrar la verdad y hacer simultáneamente Literatura cuando ni siquiera un perfil es definitivo? Quizás existen tantos perfiles posibles como editores dispuestos a pagar por ellos.

Anonymous said...

Literatura de personajes reales
O sea? Ficción o No ficción