"Nothing. . . Everything. . . Nobody. . . Somebody."
Thursday, August 9, 2007
La verdadera verdad incómoda: a más diversidad, menos civismo
Malas noticias. Este es el tipo de nota que puede ser utilizada por los siempre malos de la película, los conservadores, para decirle a los caviares: "¡yo te dije!". El investigador y activista social Robert Putnam, luego de entrevistar minuciosamente a más de 30,000 personas pertenecientes a 41 comunidades distintas de los EEUU, descubrió que a más diversidad étnica y cultural, más problemas: la gente es más desconfiada, trabaja menos por su comunidad, hace menos trabajo caritativo y vota menos. ¿Qué dirán los progres ahora?
La nota salió aquí, y coincide de algún modo con las discusiones sobre racismo local de ahora último. Por supuesto, el académico Putnam se siente desconcertado por sus hallazgos, porque sus principios y su corazón prefirirían haber encontrado otra cosa. Sería desafortunado, dice, que una visión progresista negara el reto jodido que plantea la diversidad, pero sería igualmente desafortunado que un etnocentrismo conservador negara que asumir ese reto es posible y deseable. ¡Vamos caviares!
Gran conclusión expresada en términos técnicos: a más diversidad, menor capital social. Pero no sólo eso: el estudio de Putnam se baja también las dos teorías centrales sobre diversidad étnica y racial: la que por un lado afirma que la diversidad trae armonía y comprensión entre los individuos, y la otra que dice que, por el contrario, produce tensión y discordia. Ni lo uno, ni lo otro: a más diversidad, hay como un desgano cívico por hacer cosas, dice Putnam
Sin embargo, ¿qué hay de las grandes capitales del mundo, económicamente ricas, creativas y recontra diversas, como Nueva York, Londres o Los Angeles? Aquí el truco: si bien cívicamente la cosa anda mal, es en el trabajo donde esta diversidad sí encuentra un efecto positivo: ver un problema desde distintos puntos de vista, produce mejores soluciones. A eso algunos especialistas llaman "la paradoja de la diversidad". ¿Qué hacer entonces? Gran discusión.
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
Blog Archive
-
▼
2007
(128)
-
▼
August
(17)
- Ombloggismo
- The World Against China
- 7.9
- ¿Muerte al "triangulo de vida"?
- Izquierda, derecha, ¡marchen!
- Organización
- Homo homini lupus
- Sangre fluye roja por la carretera
- ¡Por la metagalaxia!: ¿es racista Bedoya Ugarteche?
- No soy Daniel Salas
- La verdadera verdad incómoda: a más diversidad, me...
- Fin de la chacota
- Concursa y gana: ¿quién es y qué hace el señor de ...
- ¿Malditos racistas?
- Blooper periodístico
- Media Wars! (otra vez)
- Macondolypse Now!
-
▼
August
(17)
4 comments:
Fantomas:
Creo que hay una falla de fondo: Se investiga los EEUU como si fueran un país "normal". Cuando quizá es mucho más acertado decir que EEUU es una sociedad en crisis, muy paranoica, con un racismo reforzado por otros procesos y con casos de excepción que marcan su carácter (concretamente, la libre tenencia e igualmente libre disposición agresiva y hasta sicópata de armas de fuego). EEUU NO es una sociedad normal y el redoblamiento cotidiano del miedo es un ejemplo de ello. Mira, es como averiguar en un tuberculoso la situación viral de los seres humanos. Lo que no quiere decir que yo avale eso de "a más diversidad, más tolerancia y cantarán los prados y cantarán las flores, con armoniosa voz..."
interesante. va muy de acuerdo con lo que plantea tanaka sobre a más participacionismo menos democracia. es decir, la diversidad y la participación son buenas, pero si no hay una base política (y social) común (para el caso de la participación ciudadana, partidos), aumentan las relaciones verticales y autoritarias.
a javier. en efecto la sociedad norteamericana es, digamoslo asi, excepcional. pero no deja de ser un referente y nosotros, los de abajo, no dejamos de sentir su influencia. si no, diselo a cotler, cuando en su critica al libro de althaus ponia ejemplos de usa cuando comparaba las brechas entre los ricos y pobres.
a roberto: lo que mencionas lo entiendo así: lo que tiene nuestra sociedad, creo, son estas ganas de regresar a la democracia "directa" donde cada grupo de interes manifiesta como sea y donde sea sus reclamos. ergo, el desorden, porque somos 28 millones de peruanos. obviamente lo que esta fallando es la representatividad, llamese en su modo mas tradicional, partidos politicos.
es decir, no creo que de por sí la diversidad sea buena o mala, es básicamente una condición cultural y social. el problema es qué hacemos con ella. podría sobreentenderse que una sociedad muy diversa esté condenada a la falta de civismo. creo que justamente el análisis debe llevar a sacar nuestra mayor creatividad (y no nuestra diversidad creativa).
Post a Comment